La Luna, arquetipo del materno, de las raíces, de la pertenencia al clan, prosigue su viaje a lo largo del zodiaco y hoy se une a Quirón retrógrado en Aries, el sentir de haber vuelto a la Tierra para tener que romper esquemas y cadenas, con toda la fatiga y la dificultad que esto implica.
El aspecto Luna y Quirón retrógrado conjuntos va a traer atención e incluso curación a las grietas producidas por cada memoria de exclusión grabada dentro de las células. La Luna es la Madre que abraza al niño no nacido o al niño que le ha sido arrebatado, yendo a aliviar el dolor desgarrador de la separación. Hay una gran aportación de paz en este movimiento de hoy, también gracias a la acción de Mercurio retrógrado que está cavando en los pliegues del alma para extraer las espinas que han creado pus y dolor.
Por supuesto, se puede sentir un poco de densidad porque se está aventurando en territorios desconocidos, profundos y delicados. ¿Cuántas veces hemos vivido desgarros traumáticos? ¿Cuánto dolor causado por el amor imposible? Esta acción de llevar luz en algunas fragilidades interiores permite establecer una buena conexión con las cualidades esenciales del corazón humano… la fuerza, la confianza, el amor, la compasión, la paciencia, la paz. Lo necesitamos mucho. Hagamos las paces con la presencia del dolor y dejémoslo florecer como una rosa.
El viaje continúa, cada día se va añadiendo un pasaje dentro de un nuevo túnel cuya existencia ignorábamos.
Mantengamos la gratitud en el corazón ….estamos participando en un proceso colectivo de purificación de la Tierra.
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