Desde que Júpiter entró en Capricornio, se ha formado una cuadratura con Quirón en Aries. Se trata de un aspecto de gran tensión, uno de los primeros en este paso 2019/2020. La primera tensión que se siente es el desplazamiento hacia la meta que se desvanece. Pensamos que sería más corta la llegada, pero aún no ha terminado. El hogar se vislumbra, pero todavía no estamos allí. Sin embargo, es sólo una fase que sirve para ser conscientes de las tremendas responsabilidades que hemos asumido para sentirnos vistos y considerados. Quirón vuelve en movimiento directo el próximo 13 de diciembre, retomando el camino que lo lleva a conquistar su lugar en la vida. Júpiter ahora está tratando de animarlo a concentrarse en el objetivo, a no distraerse por las voces del pasado, mirando hacia adelante con la fuerza de la determinación de haber logrado llegar hasta aquí, a pesar de todo. Este es un paso fundamental. Liberarse de las ilusiones de no lograrlo. Es una invitación a ocupar un punto de vista nuestro, arraigarse en la forma que hemos modulado hasta ahora. Por fin y definitivamente nos damos cuenta de que todo está en nuestras manos, así estaremos listos para pasar por el Rito de Iniciación de Saturno conjunto con Plutón, del 07 al 14 de enero a 22° Capricornio.
Precisamente el 10 de enero será el Plenilunio en Cáncer y Eclipse penumbral de Luna a 20°, opuesta a la conjunción. Así no nos faltará nada. Recuerdo que los eclipses son un momento de reseteo, que Saturno y Plutón remodelarán las conciencias, haciéndolas pasar por el ojo de la aguja. Dado que otro eclipse tendrá lugar el 26 de diciembre, yo diría que lo único que es posible es avanzar paso a paso, tratando de cuidarse a sí mismo. No hagamos planes ahora, al menos hasta mediados de enero. Vamos a ser tan diferentes después, que va a ser muy difícil cumplir las decisiones tomadas en un estado de conciencia anterior.
Así que respiremos y observemos la Vida que se convierte en un molde perfecto para nuestra vida. Es hora de dejarse llevar.
No Comments