En su paso por Aries, el Sol está dando fuerza a la cruz de los signos cardinales, que ya desde finales del año pasado, está manteniendo abierta una puerta que permite el paso a algo nuevo, un estado de conciencia del que se habla desde hace mucho tiempo…..mostrar el paso de un tipo de tiempo artificial y mecánico, en el que la mente es prisionera de sí misma para crear caos y miedo, a un tipo de Tiempo como Arte, en el que los corazones se unen sólo porque la Unidad es la condición divina por antonomasia.
De ahí viene la telepatía. Unidad, telepatía, transmisión espontánea, son las condiciones naturales también de la Tierra, también nuestras, pero nos hemos olvidado completamente, por toda la historia que siempre ha pulsado a nuestro alrededor, por la forma en que nuestro mundo ha sido creado. El nuevo estado de conciencia por el que estamos transitando prevé la disolución constante y continua de ese tipo de mundo. Por eso estamos tan asustados.
Pero mientras tratamos de salir del miedo, podemos ver un poco de luz, y eso nos guía hacia el objetivo. Así que si todo se pone en duda, si percibimos peligro, alarma, y nada parece funcionar, es normal. Todo está bien porque simplemente estamos siguiendo un curso que se podría definir como natural de la existencia, que los humanos no entendemos porque todos estamos desconectados de la Tierra, con su ritmo y el pulso de su corazón. Pero la Tierra sabe a dónde va y sigue el ritmo espontáneo de los ciclos dentro de los cuales resuena, que la llevan a una etapa posterior, en su reconectarse con una Inteligencia grande de la que forma parte, y en consecuencia también nosotros, como sus criaturas, somos parte.
Así que este es el poder de este equinoccio: es ser capaz de captar la frecuencia del Sol y arraigarla en nosotros mismos para despertar la Conciencia Solar, dando fuerza al plexo solar, al Sol interior, al recordar que estamos hechos a imagen y semejanza de nuestro Creador.
No Comments